Para muchas personas, realizar un viaje a Fernando de Noronha significa realizar un sueño. Una vez en el Archipélago, usted tiene la sensación de estar en una maravillosa parte de Brasil. Está a 545 km de la costa, con 2100 habitantes y donde el turismo es desarrollado de una manera sostenible, creando la oportunidad de un equilibrio entre el hombre y la naturaleza en uno de los más importantes santuarios ecológicos del mundo.
Para llegar a Fernando de Noronha hay dos opciones por avión. Hay dos vuelos diarios desde Recife y, dos desde Natal. Por mar usted puede hacer un inolvidable crucero a bordo de navíos que visitan Noronha entre octubre y febrero. La distancia de Recife, capital del estado de Pernambuco, es de 545 km, de Natal, capital del estado de Rio Grande do Norte, es de 360 km y de Fortaleza, capital del estado de Ceará, de 710 km.
El Archipiélago de Fernando de Noronha está formado por 21 islas y, la isla principal,la mayor de ellas, también se llama Fernando de Noronha y, es la única habitada. Las demás islas están ubicadas en el área de la Reserva Nacional Marina y no están habitadas. Sólo pueden ser visitadas con una permiso especial facilitado por IBAMA (Instituto del Medioambiente de Brasil).
La isla principal tiene 17km2, es accidentada, con varias elevaciones, de las cuales las más importantes son: Morro do Pico, con 323 m de altura; Morro do Espinhaço, con 223m; Morro do Francês, con 195m; Alto da Bandeira,con 160m; Morro do Curral, con 126m y Morro de Santo Antônio, con 105m.
En esas islas hay sitios históricos (Vila dos Remédios, Vila da Quixaba, Ruinas de las fortalezas de São Pedro do Boldró, Santo Antônio, de Nossa Senhora da Conceição y Parque de Santana), los pueblos residenciales, el pueblo del Departamento de Protección del Áerea, el aeropuerto, la guardería, la escuela, el hospital, la estación de fuerza de Tubarão, la estación de tratamiento de agua, la estación de desalinización, la estación de tratamiento de basura y el servicio de telefonía.
El archipiélago de Fernando de Noronha está dividido en dos unidades de conservación: la Reserva Nacional Marina y el Área de Preservación Ambienal.
Cada una posee sus propias reglas de preservación para facilitar el uso y, la preservación ambiental con un desarrollo sostenible. Para disfrutar las varias atracciones y experimentar un poco de la historia de nuestra colonización, un viaje a Noronha requiere por lo menos 5 días. Hay varias actividades y opciones de paseos que satisfacen a diferentes personas y ofrecen al visitante la oportunidad de ver todas las bellezas naturales de las islas.
En Fernando de Noronha la temperatura media es de 28ºC en tierra y 26ºC en el mar y sólo hay dos estaciones: la seca (de septiembre a marzo) y la lluviosa (de abril a agosto). Sin embargo, en la estación lluviosa hay sólo lluvias ocasionales intercaladas por un sol intenso.
Además de las playas, las bahías y la naturaleza extremadamente rica, Noronha también ofrece otras sorpresas para los turistas. Son 500 años de historia que transforman el archipiélago en un real Patrimonio Histórico que merece ser visitado y, sobretodo, preservado.
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